Saludos, tengo exactamente cuatro años sin escribir en este humilde blog, sin embargo, considero que la
perspectiva actual de la Ciencia en México merece toda la atención posible.
Recuerdo cuando era un estudiante de primaria (o de secundaria, realmente a esta edad confundo las vivencias de esa etapa de transición) en una clase nos explicaron sobre la Teoría de Generación Espontánea, que puede resumirse en que algunas sustancias o seres vivos aparecían por sí mismos. Recuerdo que varios nos reímos ¿Cómo podía ser la gente de antes tan ignorante?
Bueno, resulta que hoy en día no estamos tan lejos.
Frases como:
"No uso las matemáticas para nada en la vida real"
"Explorar el espacio no sirve cuando tenemos otros problemas más reales aquí abajo"
"Póngase a hacer algo de provecho en vez de pasársela enfrente de la computadora"
No parecen del todo extrañas a quienes nos dedicamos profesionalmente o por pasatiempo a cualquier rama de la Ciencia, desde la Astronomía hasta la Zootecnia.
Muchas personas piensan que la tecnología que usamos hoy en día aparece por generación espontánea en el mercado y desconocen el esfuerzo e inversión en la investigación y desarrollo de nuevas y mejores tecnologías o conocimiento que permiten el crecimiento de un país.
Si, a la mejor usted no usa más que la suma y la resta en su vida diaria, pero la persona que hizo posible la miniaturización de los sensores CCD en su celular si usó álgebra vectorial o la persona que hace posible que usted pague la menor cantidad posible por el transporte de un producto que compra en su tienda de abarrotes favorita use teoría de grafos para identificar la ruta con menor costo. Es muy probable que detrás del sitio que usted visita con mayor frecuencia desde su computadora o su celular exista todo un ejército de profesionistas, técnicos y personas entrenadas y educadas en ingeniería de sistemas.
Aunado al desconocimiento público, parte de la identidad de ciertos grupos que se han insertado en la escena política de nuestro país (y en otros) se basa en el rechazo de la evidencia científica para empujar agendas de intereses privados aún en contra del bienestar de la población y del medio ambiente.
Es por eso que invito a las personas interesadas a participar en
La Marcha por la Ciencia en la Ciudad de México o en su ciudad este sábado 22 de abril, porque en México necesitamos más científicos y menos políticos.